El Espíritu Santo es co-igual con el Padre y el Hijo de Dios. Está presente en el mundo para hacer conscientes a los hombres de su necesidad de Cristo Jesús. Vive en cada cristiano desde el momento de la salvación.
Provee al cristiano de entendimiento para vivir, entendimiento de las verdades espirituales y dirección hacia lo que es correcto. Da a cada creyente un don espiritual al momento de su salvación. Como cristianos, debemos vivir bajo su control diariamente.

2 Corintios 3:17 | Juan 16:7-13 | Juan 14:16,17 | Hechos 1:8 | 1 Corintios 2:12,3:16 | Efesios 1:13 | Gálatas 5:25 | Efesios 5:18